El Málaga de Antonio Tapia continúa confirmándose como el equipo revelación de la Liga. Siendo un recién ascendido está luchando por entrar en la Copa de la UEFA. Hoy ha ganado en Pamplona a Osasuna por 2-3 con goles de Apoño de penalty, Lolo y Salva Ballesta.
Tras un inicio de campeonato desolador, en el que los costasoleños ni sumaban ni veían puerta, dieron un golpe encima de la mesa y con victorias ante equipos de entidad (ha derrotado a Villarreal y Sevilla y puesto en apuros al Real Madrid en los dos partidos) aseguraron la permanencia y ahora sueñan con algo más.
El secreto del éxito es una mezcla de veteranos que rinden a un gran nivel, canteranos, cedidos y ex malaguistas que retornan. Salva Ballesta o Albert Luque pertenecen al primer grupo. Sin ser titulares son decisivos y han recuperado su mejor versión de antaño. En lo que a canteranos se refiere, Jesús Gámez se ha consolidado como uno de los mejores laterales derechos (también puede jugar de central)del fútbol nacional. Lástima para los de Martiricos que tenga todas las papeletas para acabar en el Sevilla la temporada próxima. Otro gran descubrimiento está siendo Apoño en el centro del campo, llevando la manija del equipo y transformando las penas máximas como nadie.
Los cedidos como Lolo, otro gran descubrimiento ya que Tapia le ha reinventado como mediocentro y ha estado a un gran nivel, Duda, que tiene un guante en su pierna izquierda, o Adrián así lo demuestran. Duda vive su segunda etapa en Málaga al igual que otros jugadores como Calleja, Nacho o Fernando, a los que compromiso no les falta. Luego está la eclosión del intermitente Eliseu, al que se le rifan varios equipos de Europa. El portugués tiene una cláusula de rescisión de 600.000 euros y es una pena para las arcas de los boquerones que no puedan ingresar más dinero por él.
El caso es que en La Rosaleda el sueño sigue muy vivo. La ciudad entera vibra con un equipo cuyo objetivo inicial era la permanencia. Hace poco tiempo el club corría riesgo de desaparecer. La labor de Fernando Sanz, entre otros, obró el milagro tras la ley concursal. Ahora esperan pasear su nombre por Europa la próxima temporada. Su afición, una de las más internacionales por la gran presencia de hinchas británicos en las gradas, está deseando corear por el Viejo Continente aquello de: Oh Málaga, Oh Málaga, is wonderful, is wonderful.